¿Por qué no le dedicaron un par de tardes más? (La pregunta)

15 Desembre 2013

Hace un par de días los líderes de CIU, ERC, ICV y CUP llegaron al acuerdo de celebrar una consulta ciudadana el próximo 9 de noviembre. Las preguntas de la consulta pactada son las siguientes:

¿Quiere que Catalunya un estado?

En caso afirmativo, ¿Quiere que sea un estado independiente?

No se esperaba un formato de doble pregunta para la consulta. Conocíamos la exigencia de algunos grupos para que la pregunta fuera inequívoca y preguntara directamente sobre independencia, pero no sabíamos cuál iba a ser el redactado exacto de la propuesta. Obviamente, el hecho de que no se esperara una doble pregunta no es una crítica.

Así pues, el pasado jueves se anunció el enunciado de la pregunta y la fecha.  No se anunció como iba a ser el proceso exacto para llevarla a cabo: ¿Se va a tratar de pactar con el estado? ¿Se va a elaborar un censo propio y se va a hacer unilateralmente? ¿Se va intentar lo primero, y en caso negativo, se va a realizar lo segundo? En el segundo caso: ¿Cómo se va a elaborar el censo? ¿Cómo se va a establecer todo el dispositivo electoral? ¿Qué pasará con los miles de emigrantes catalanes? ¿Habrá recursos públicos para las opciones electorales? ¿Cómo se distribuirán? ¿Existirá límite de gasto? ¿…?

Tampoco conocemos detalles sobre el escrutinio. Sabemos que los que voten NO en la primera pregunta, no podrán responder la segunda, pero nada más. Esto ha hecho que ya empiecen las especulaciones al respecto. Comentemos.

Marta Rovira, Secretaria General de Esquerra Republicana, ha asegurado que basta con dos 51% afirmativos por ciento en ambas preguntas. Es decir, que el 26% podría imponer el resultado final de independencia –personalmente creo que si el referéndum se realizara mañana, ambas respuestas tendrían un porcentaje afirmativo superior, pero es otro tema-. Convergencia i Unió, por su parte,  no ha dicho nada al respecto. Ante una pregunta que he hecho vía twitter, han respondido que informarán más detalladamente sobre esto. No han aclarado ni cuándo ni a través de que medio lo harán. Da la sensación que la respuesta no está clara.

¿No deberíamos tener más claros todos los detalles de la consulta?  Tener claro y hacer públicos todos los detalles de la consulta hasta el último milímetro y desde el minuto 0 hubiese dado más seriedad al anuncio. No hablo sólo de dentro de Catalunya y España, también internacionalmente. ¿No hubiesen podido dedicar un par de tardes más al tema?

¿Cree Marta Rovira y Esquerra Republicana de Catalunya que muchos países reconocerán el resultado de una consulta unilateral, con pregunta no del todo clara y explícita, y que tiene el apoyo de menos del 50%? ¿Cree, de verdad, que algún país reconocerá el resultado del 26% de los electores? ¿Hablamos sobre observadores internacionales? No comentamos sobre el % de ciudadanos que representaría ese resultado, ya que entraríamos a especular sobre datos de participación. Lo que está planteando Marta Rovira es un fraude democrático. Una especie de trampa en la que se pretendería quitar de encima a una parte importante de la población, la que votaría NO en la primera cuestión, para que sólo la que votase sobre la independencia o no de Catalunya la que en la primera votación decidiese votar Sí.  Un despropósito. Estoy convencido que el criterio de Marta Rovira no será el que regirá oficialmente en la propuesta de consulta.

Creo que la urgencia jamás puede ser excusa para hacer las cosas mal o a medias. Los interrogantes generan dudas y algunas afirmaciones generan mala imagen.